El encuentro

Notaba como me miraba, cada día, al pasar a su lado... No sabia muy bien como sentirme. Ayer, por fin, se produjo el ansiado encuentro. Nuestros cuerpos se rozaron, entraron en contacto, y una explosión de emociones invadió mi interior. Al principio me sentí algo aturdido, pero mas tarde, ese aturdidor sentimiento que sentí se convirtió en dolor... Ahora procuro pasar lejos de ella, que me mira con ojos de viciosa, ansiando repetir el encuentro.

Si, me he dado en el dedo meñique del pie con la pata de la mesa.